En el año 80 d.C., el emperador Tito inauguró el edificio más espectacular diseñado por el hombre para el entretenimiento de las masas: el Coliseo, noticia de la que se hicieron eco todos los cronistas de la época y posteriores.
Los juegos inaugurales
duraron 100 días y se estima que se mataron hasta 9.000 animales entre grullas,
elefantes, leopardos, tigres, liebres, osos, toros, leones, jabalíes, un
rinoceronte, un búfalo y un bisonte entre otros. Parece que siguieron el
esquema general de los juegos romanos:
- Venationes (luchas con animales salvajes): Se desarrollaban en la sesión de la mañana. Destacaron una lucha
entre un elefante y un toro, vencida por el primero que se arrodilló ante Tito
tras su victoria. Marcial señala que a veces los animales no cooperaban, como
cuando unos leones no atacaron a las liebres o un rinoceronte no quería luchar.
- Ejecuciones de Criminales: Tenían lugar al mediodía. Ese momento era aprovechado por las clases altas para abandonar el anfiteatro para almorzar. Los ajusticiados solían morir crucificados o enfrentándose a diversas fieras. A veces también se hacían representaciones de obras mitológicas con ellos como protagonistas en las que siempre había un final trágico.
- Munera o lucha de gladiadores: Se celebraban por la tarde. Igualmente en esta franja tenían lugar la recreación de batallas famosas y naumaquias aunque no está claro si se celebraron en el propio anfiteatro o en un lago cercano. Suetonio indica que Domiciano celebró batallas navales en el anfiteatro mientras que Dión Casio afirma que Tito “llenó este mismo escenario con agua” (Historia Romana, LXVI, 25).
Además de los
espectáculos cuenta Dión Casio que “Tito
también proporcionó al pueblo algunas cosas de utilidad. Arrojaba al
anfiteatro, desde lo alto, pequeñas bolas de madera con diversas inscripciones:
una con algún artículo de comida, otras de ropa, otra con una vasija de plata o
a veces de oro, también caballos, animales de carga, ganado o esclavos. Quienes
se hacían con una la llevaban a los encargados de la distribución de regalos,
de quienes recibían el artículo nombrado” (Historia Romana, LXVI, 25).
No obstante, el poeta
Marcial ofrece la descripción más completa y contemporánea de los juegos en su
obra De Spectaculis (Sobre los
espectáculos) con una gran carga de elogio a Tito pero es quien más detalle
aporta, incluido la única lucha completa entre dos gladiadores que ha llegado
hasta nosotros. Se trata del combate entre Vero y Prisco, que fue tan épica que
quedó en empate y les valió la libertad a los dos, algo que no era muy usual “Mientras que Prisco y Vero alargaban el
enfrentamiento, y por tanto tiempo la lucha fue igualada en ambos lados, altos
y repetidos gritos reclamaban la libertad para los hombres; pero César siguió
su propia ley; era la ley de luchar con el escudo hasta que un dedo se alzase;
hizo lo que le estaba permitido, a menudo dio comida y regalos. Pero se llegó
al final con la misma igualdad: iguales al luchar, iguales al ceder. César
envió espadas de madera a ambos y palmas a ambos: por tanto el coraje y la
habilidad recibieron su premio. Esto no tuvo lugar ante ningún Príncipe salvo
tú, César, cuando dos lucharon, ambos fueron victoriosos” (31, 29-27).
Muy bien, pero ¿qué pone exactamente en la inscripción del sextercio? No consigo adivinarlo,
ResponderEliminarSegún puedo apreciar los títulos de tito: Imperaotr Cesar Vespasiano Consul por VII vez, bla, bla, bla. Saludos
ResponderEliminarGenial como siempre, sabes que es la estructura que se observa al lado derecho en la moneda... Un acueducto?
ResponderEliminarHe estado buscando información, y no lo aclaran. Lo de la izquierda es una fuente. Lo único que dicen es que una estructura arquitectónica de dos pisos. Saludos
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