Aunque Pompeya es la más mediática de las ciudades arrasadas por el Vesubio en el año 79 d.C., por ser la mayor y la que más restos arqueológicos ha legado a la posteridad, también Herculano y Estabia fueron sepultadas por la furia del volcán ese fatídico día y tienen cosas interesantes que contarnos sobre la cultura romana.
Herculano
La ciudad que recibió su
nombre de su legendario fundador: Hercules, sufrió una suerte más fatídica aún
que Pompeya, pues durante las primeras horas de la erupción, el volcán descargó
sobre ella una nube a 400 ºC que recorrió la ciudad a una velocidad de 80 km/h,
provocando la muerte por shock térmico de un gran número de habitantes.
Siguieron en las siguientes horas cinco oleadas piroclásticas.
El lodo volcánico
calcinó la ladera del propio monte y arrastró hasta el mar en su camino
siniestro todo lo que encontró a su paso. Este fenómeno provocó que en
Herculano la parte de abajo de los edificios estén muy dañadas, mientras los
pisos superiores quedaron intactos, suspendidos sobre el magma petrificado.
Las diferencias en la
manifestación de la tragedia en Herculano también provocaron que se haya
conservado gran cantidad de material orgánico, aunque carbonizado: trozos de
madera, vigas, muebles, bibliotecas llenas de papiros, escritos sobre
tablillas, tejidos….todo aquello que en Pompeya pereció.
No obstante, sólo se han excavado 6 de las 20 hectáreas
que ocupaban la ciudad, y muchos de sus emblemáticos edificios nunca podrán ser
recuperados por estar enterrados bajo la ciudad moderna.
Como en Pompeya se han
sacado a la luz construcciones de todo tipo: termas, termopolios, palestras y
suntuosas villas, la mayoría de ellas con vistas al Golfo de Napóles.
Especialmente
interesante es el frente marítimo. Éste se utilizaba para guardar barcas de
pesca bajo una amplia terraza levantada en paralelo a la línea de costa donde
se construyeron doce espacios abovedados divididos en dos grupos de seis por
una escalinata que conducía al interior de la ciudad. En estos hangares se encontraron
cerca de 300 esqueletos de personas que en su huida hacia la costa se
refugiaron mientras esperaban que algún barco los sacara de allí. Sin embargo,
el mar se agitó de tal manera que nadie pudo llegar a por ellos. Es conmovedor
ver como algunas personas llevaban sus ahorros en un saquito, otras, sus joyas,
un médico cargaba incluso su instrumental quirúrgico, un soldado su armadura y
vestimenta completa; todos estos objetos fueron testigos mudos de la gran
tragedia de sus portadores. También en la playa se encontró una barca encallada
entre la arena y el lodo volcánico.
En cuanto a las villas sobresalen
la Casa de Neptuno y Anfítrite, en la que destaca la rica decoración del
triclinio y el hermoso ninfeo revestido con mosaicos coronado por máscaras
teatrales de mármol, la Casa del Esqueleto donde encontramos otro gran ninfeo o
la Villa de los Papiros.
Esta última es una gran mansión
suburbana orientada al Golfo de Nápoles que se cree fuera propiedad del suegro
de Julio César, Lucio Calpurnio Pisón Cesonio. Las dimensiones de la villa eran
impresionantes: su fachada se extendía 253 metros a lo largo de la costa. Tenía
un inmenso peristilo que podía contener el Foro de Pompeya en su interior, pero
aún no se ha excavado en su totalidad. Desde la entrada principal, que daba al
mar, se accedía a un atrio toscano (sin columnas) que comunicaba con un pequeño
peristilo cuadrado con 10 columnas por lado y una fuentecita en forma de concha
en cada esquina. En el centro había una piscina larga y estrecha. Desde el lado
oriental del peristilo se accedía la biblioteca donde se encontraron cientos de
rollos de papiros carbonizados, que dio nombre a la villa. El gran peristilo poseía
una gran piscina central y jardín decorado con una verdadera colección de
escultura de gran calidad artística.
Se encontraba a unos 6
kilometros al sur de Pompeya y a unos dos kilómetros del mar. En esta ciudad
murió Plinio el Viejo sofocado por los gases en la Villa de su amigo
Pomponiano. La ciudad sufrió menos daños que Pompeya y Herculano, de ahí que
volviera a ser habitada y que haya arrojado menos restos que las otras dos,
aunque son de gran interés la monumentalidad de sus grandes villas urbanas.
Estos edificios se
distribuían en terrazas, adaptándose a la orografía del terreno. A lo largo de
las excavaciones se han encontrado importantes murales pictóricos, mosaicos y
multitud de objetos de diferentes materiales.
En Estabia se han
excavado parcialmente nueve complejos siendo los lugares más importantes a
Villa San Marcos con un gran patio porticado con piscina y un ninfeo), la Villa
Arianna con una impresionante pintura dedicada a ese tema o la Villa del
Pastor, un posible balneario).
Impresionante como siempre, y eso que nos haces un resumen
ResponderEliminarEsta vez he resumido mas porque no conozco los lugares in situ y porque no quería seguir extendiendome mas con el tema del Vesubio. Gracias!
ResponderEliminarNo sabía lo de estabia, que buen dato, siempre enseñándonos algo nuevo, con que vas a a seguir... Con el coliseo, Domiciano?
ResponderEliminarAhora me toca un poco la relacion de Tito con Berenice, el incendio de Roma y la pestilencia y para culminar el Principado de Tito, dedicare una serie de articulos al Coliseo, que x ser uno de los lugares q mas amo en el mundo, necesita una cobertura especial. Despues de la muerte a Tito, comenzaremos con Domiciano. Saludos
ResponderEliminarSe viene buena esta temporada!....saludos!
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