Datado
entre los años 114 y 117, es un arco construido en honor de Trajano con ocasión
de la apertura de la Via Trajana (una variante de la Via Apia, entre Benevento
y Brindisique ahorraba un día de camino).
Es
un ejemplo de arquitectura oficial fuera de Roma aunque su monumentalidad lo
acerca a los arcos del Foro Romano, en especial al de Tito, del cual se inspira
directamente.
Se
conserva casi íntegro y es destacable su decoración escultórica, que son un gran
testimonio de la vida romana, apareciendo en ellos representados algunos de los
personajes más relevantes de época de Trajano. Presentan gran calidad
artística, una gran profusión de detalles y una exquisita ejecución. Trajano
aparece representado con gran realismo, siguiendo la tónica de la escultura
romana.
Los
relieves del arco de Benevento están concebidos para engrandecer la figura del
emperador. Trajano es representado como el ciudadano más perfecto, el garante
de la seguridad del Imperio, un buen gobernante, comprometido con sus
obligaciones y con los más necesitados. Una de las fachadas narra diversos
episodios de la vida de Trajano y su estancia en Roma, mientras que los de la
otra representan la política exterior del emperador. Ambos as están separados
por bandas con columnas aladas.
El
friso que separa el ático del cuerpo presenta un variado repertorio sobre el
triunfo celebrado tras la conquista de la Dacia. Trajano aparece guiando una
cuadriga acompañado por su séquito y los prisioneros de guerra. Al fondo se
divisan los monumentos de Benevento.
En
las caras internas encontramos los relieves de mayor carga propagandística del
arco: en el lado sur se representa un congiarium
(acto en el que el emperador regalaba pan, aceite o dinero a la plebe).
Enfrente, se retrata la Institutio
alimentaria, a través de la cual se repartía alimentos a los más
necesitados y, en especial a los niños. Trajano está representado en él con
gran naturalidad.
En la bóveda, Trajano aparece siendo coronado por una Niké o Victoria alada, mientras que los relieves del ático hacen alusión a la pacificación y romanización de las provincias fronterizas del Rin, Danubio y Mesopotamia.
En época de los longobardos el arco quedó englobado en las murallas de la ciudad, conociéndose como Porta Aurea. Ha sido restaurado en varias ocasiones y aislado del tráfico de la ciudad.
Muy interesante a pesar de las similitudes con el Arco de Tito. Tómate unas largas vacaciones porque te lo mereces.
ResponderEliminarMuchas gracias!!Felices Vacaciones también para ti!
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